Viajar a Bélgica y solo conocer Bruselas es, en mi humilde opinión, una oportunidad desaprovechada. Aunque la capital belga mezcla impresionantes murales de cómics, edificios imponentes como el Parlamento Europeo, vida nocturna y gastronomía, existen zonas más representativas del país. Además, al ser un país tan pequeño y con excelentes conexiones ferroviarias, moverse por Bélgica es muy fácil.
Flandes, ubicada al norte de Bruselas, es una región que reúne algunas de las ciudades más turísticas de Bélgica como Brujas y Amberes. Esta región destaca por su influencia en el arte, siendo la cuna de la escuela flamenca de pintura. La escuela resaltó por mezclar un Gótico tardío con Renacentista y Barroco. Algunos de los artistas flamencos más reconocidos son Jan van Eyck, Rubens y Rembrandt.
Pero Flandes es mucho más que arte. De hecho, cada una de las ciudades que forman esta región tiene sus propios encantos. Por ejemplo, resulta imposible no sentirse en un cuento de hadas o un cuadro al recorrer las casitas, callejuelas y castillos medievales de Brujas. Por su parte, Gante mezcla canales escénicos y atardeceres espectaculares con una atmósfera más citadina y animada.
En este artículo, te proponemos una ruta recomendada por Flandes, partiendo desde Bruselas. Hemos incluido sugerencias de lugares para comer, información sobre transporte, ciudades y atracciones imperdibles de este pintoresca región belga.
Ruta recomendada por Flandes, Bélgica
1. Bruselas
Tiempo recomendado en Bruselas: 1-2 días
Aunque no forma parte de Flandes, al ser la capital de Bélgica y la Unión Europea, es probable que Bruselas sea tu puerta de acceso. Por lo tanto, me he tomado el atrevimiento de hablar de Bruselas en esta ruta. Además, no importa cuántas veces hayas visitado la ciudad, siempre encontrarás algo que hacer, más allá de qué tan larga sea tu estancia.
Entre los lugares imprescindibles de Bruselas destacan la Grand Place, la plaza más importante de la ciudad, una de las más bonitas del mundo. Ubicada en pleno corazón de Bruselas, en la Grand Place (Grote Markt) se halla una serie de preciosos edificios del siglo XVII. Entre los edificios principales de la plaza se encuentran el ayuntamiento de Bruselas y el Hotel de Ville, el más antiguo de la Grand Place. La Maison du Roi. que en su momento fue residencia monárquica, también está en la Grand Place y hoy en día acoge un museo.
Otra atracción del centro histórico de Bruselas es la Manneken Pis, una escultura de bronce cuyo nombre se traduce literalmente a “hombrecito haciendo pis.” Esta escultura se ha convertido en un referente de Bélgica por excelencia.
Asimismo, caminando por el centro, una de las mejores zonas donde dormir en Bruselas, te encontrarás con icónicos dedicados a las tiras cómicas. Y es que muchos de los personajes más icónicos del cómic, el noveno arte, fueron ideados por artistas belgas. Por lo tanto, en las calles de de Bruselas podrás ver piezas en honor a Tintín, Astérix y Spirou, por nombrar tan solo algunos.
Asimismo, al visitar Bruselas, tienes que degustar los mejillones de restaurantes tradicionales como l’Ancien Bruxelles. Tampoco puedes dejar de probar los gofres y las patatas fritas (que, por cierto, en realidad se inventaron en Bélgica y no en Francia).
Ya que Bruselas no pertenece a Flandes, con que pases uno o dos días en la ciudad será más que suficiente. Si aún no has estado, también te recomiendo acercarte al Atomium, aunque sea para hacerte buenas fotos con este particular monumento de fondo.
2. Amberes
Tiempo sugerido en Amberes: 2 días
Desde Bruselas, puedes coger tren al norte, hacia la primera parada oficial de esta ruta por Flandes: Amberes. Este trayecto de 45 minutos tiene un coste inferior a los 8 euros. Eso sí, procura reservar unos minutos solo para contemplar la estación de trenes de Amberes, con una belleza que te dejará sin palabras.
Amberes o Antwerp está a unos 15 kilómetros al sur de la frontera entre Bélgica y los Países Bajos. Esta ciudad es conocida por su importancia en la industria del diamante y por tener el segundo puerto más grande de Europa.
Pero Amberes tiene mucho que ofrecer más allá del puerto y los diamantes.
En lo que a legado artístico se refiere, en Amberes se encuentra la Rubenshuis. En su momento, este palacete fue la residencia y estudio de Pedro Pablo Rubens y hoy en día funciona como museo. Además de albergar obras de Rubens, este museo llama la atención por su estilo inspirado en la arquitectura italiana y sus preciosos jardines.
Otra actividad que te recomiendo es visitar la Chocolate Nation de Amberes, una especie de museo interactivo dedicado al chocolate. En este museo aprenderás sobre el proceso de fabricación del chocolate belga, una de las más exitosas importaciones de la nación. Por si fuera poco, al final del recorrido podrás catar diferentes tipos de chocolate, uno más delicioso que el anterior.
3. Gante
Tiempo sugerido en Gante: 1-2 días.
Después de Amberes, continuamos esta ruta por la Región Flamenca de Bélgica moviéndonos hacia el suroeste. Cogeremos un tren que nos dejará en menos de una hora en Gante, mi ciudad favorita de todo el itinerario. Aunque muchos dicen que Brujas es su ciudad predilecta de Flandes, pienso que Gante es un lugar que se siente más auténtico.
La mayor atracción de Gante se encuentra dentro de la catedral de San Bavón. Este templo del siglo XIV resguarda la “Adoración del Cordero Místico,” un famoso políptico hecho por los hermanos Van Eyck. Esta obra representa el sacrificio de Jesús para que el hombre obtuviera la redención.
El Cordero Místico impresiona por su abundancia de detalles y simbolismo, algo que sería típico en la escuela flamenca. No obstante, la historia de este retablo es incluso más fascinante, puesto que se trata de la obra de arte más robada de historia. El primer robo reportado fue en 1800, cuando las tropas de Napoleón se hicieron con los retablos como trofeo de guerra. Las tropas dejarían los retablos centrales en el Louvre y vendieron los laterales. Luego, el cordero volvería a su casa, pero sus retablos se vendieron y robaron muchas otras veces a lo largo de los años. El último hurto reportado fue en 1934, cuando el retablo de los jueces justos, cuyo paradero aún se desconoce, se extraería de la catedral.
Otra atracción de esta ciudad de Flandes es el campanario de Gante, también conocido como torre Belfort. El campanario se construyó entre 1313 y 1380 como torre de observación, con campanas para alertar sobre incendios o cualquier amenaza. En la actualidad, se puede subir al campanario de Gante para obtener unas de las panorámicas más espectaculares de la ciudad,
El street art es otro de los atractivos de Gante. Las paredes del centro, el puerto y los barrios de Gante podrás ver murales hechos con distintas técnicas, a color o en blanco y negro. De igual manera, es tanta la devoción de Gante al graffiti que hay una calle donde cualquier persona puede “dejar su huella” en aerosol.
¿Necesitas más motivos para visitar Gente? Las tiendas de segunda mano, los atardeceres dignos de postal y los centros de arte seguro que te convencen.
4. Brujas
Tiempo recomendado en Brujas: 2 días.
Seguimos en tren hacia el noroeste y en media hora llegaremos a la última parada de la ruta: Brujas.
Brujas, una ciudad llena de rincones bucólicos que le saca un suspiro a cualquiera, es una muy buena manera de terminar esta ruta por Flandes.
Brugge es la capital de la provincia de Flandes Occidental y su centro histórico ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Se trata de la ciudad medieval mejor preservada de Europa. El casco histórico de Brujas invita a perderse por sus callejuelas adoquinadas rodeadas de canales preciosos.
Entre las atracciones que hay que ver en Brujas destaca la Iglesia de Nuestra Señora, una edificación medieval del siglo XIII. Este templo cuenta con la segunda torre de ladrillo más alta del mundo. A su vez, la torre es la estructura más alta de la ciudad, con 122 metros. Otro must de esta ciudad flamenca es la escultura Madonna de Brujas, esculpida en mármol por Michelangelo en 1504 y ubicada junto a la iglesia. La escultura representa a la virgen con el niño y es la única de Miguel Ángel que salió de Italia durante la vida del artista.
Para seguir conociendo el arte de la ciudad, se puede visitar el museo de Groeninge (Groeningemuseum). La colección del museo cuenta con obras como El Juicio Final de El Bosco o La Virgen del canónigo van der Paele de Jan van Eyck.
Al igual que Gante, Brujas tiene un campanario al que se puede subir para disfrutar de muy buenas vistas de la ciudad. El belfort tiene 83 metros de altura y es uno de los edificios más emblemáticos de Brujas.
Algo que debes tener en cuenta es que Brujas es la ciudad más turística de Flandes y Bélgica. Así que, para poder recorrer con tranquilidad las calles de esta ciudad, te podrías beneficiar de despertarte más temprano para hacer fotos sin tanta gente. Asimismo, como es de esperarse, los fines de semana y festivos son más concurridos en Brujas.
Esta ciudad es pequeña, por lo que dos días en Brujas son suficientes.
Otras ciudades para visitar en Flandes si tienes tiempo
Si dispones de más de una semana y tu presupuesto te lo permite, podrías conocer otras joyas de Flandes.
Por ejemplo, en Lovaina podrás visitar fábricas de cervezas y hacer tours con cata incluida. Lovaina está ubicada al este de Bruselas, a 25 minutos en tren y En esta ciudad universitaria, llamada Leuven en neerlandés, se puede visitar un jardín botánico llamado Kruidtuin, el más antiguo de Bélgica, inaugurado en 1738. Sin embargo, la atracción más popular de Lovaina es el edificio del ayuntamiento, cuya fachada exhibe 236 esculturas de personalidades célebres de la ciudad.
Por su parte, Malinas forma parte de la provincia de Amberes y está a medio camino entre Amberes y Bruselas. Malinas, Mechelen en neerlandés, tiene atractivos como la catedral de San Romualdo y su torre de 97 metros que es Patrimonio de la Humanidad. Del mismo modo, Malinas es una buena ciudad para actividades al aire libre como, por ejemplo, navegar por el río Dyle (Dijle en neerlandés).
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