Vivas en Madrid, Ciudad de México, Bogotá o Nueva Zelanda, lo más probable es que en estos momentos estés desesperado por viajar. No te culpo, después de haber pasado meses encerrados en casa y, posteriormente, en nuestras ciudades y/o países, muchos, yo incluido, estamos ya pensando en nuestra próxima gran aventura.
Y aunque aún no hemos dejado atrás la pandemia, la buena noticia es que poco a poco el mundo está volviendo a abrirse al turismo post-coronavirus. Con buena parte de la población ya vacunada y cada vez más destinos dispuestos a recibirla, es normal que quieras viajar de nuevo… y, a poder ser, viajar barato.
Pero es fácil sentirse abrumado por todos los artículos con consejos, trucos y estrategias para viajar barato que prometen revelar secretos mágicos para encontrar increíbles ofertas en vuelos y hoteles.
En realidad, el único secreto para viajar barato es este: ser flexible con las fechas, el destino y los planes de viaje.
Ya está, lo he dicho ¿Dónde puedo enmarcar el título de gurú de los viajes que acabo de mandar a la impresora?
Y sí, seguramente estás pensando que este consejo, el único consejo que necesitas para viajar barato, escrito por este autoproclamado gurú del turismo universal, puede parecer demasiado simplista, incluso un poco condescendiente, pero antes de que cierres esta ventana y me denuncies ante el Real Colegio de Gurús y Vendehúmos de Internet, te pido que me des una oportunidad y leas un poco más.
Y no, no vivo en una burbuja. Tengo claro que la flexibilidad total en una sociedad basada en la rigidez no es factible para todos. La organización de viajes, teniendo en cuenta las obligaciones de la vida moderna, suele requerir fechas y planes específicos. Dicho esto, si logras flexibilizar al menos una parte de la planificación, seguro puedes ahorrar algo de dinero. No solo eso, puede que hasta te lo pases mejor.
Viajar barato: El cambio de paradigma
Lo primero que requiere esta mentalidad de flexibilidad viajera es un cambio de la forma en la que comenzamos a planificar unas vacaciones.
En vez de:
"Quiero ir a Ámsterdam del 5 al 9 de septiembre".
Puedes plantearte:
"Quiero ir a un lugar divertido en septiembre".
Aunque para algunas personas este grado de flexibilidad es simplemente imposible (obligaciones laborales, compromisos familiares, compañeros de viaje, miedo a la espontaneidad…) los que se atrevan a abrir sus posibilidades viajeras pueden ahorrar bastante dinero y encontrarse con agradables sorpresas.
Con la primera opción, la rigidez de fechas y destino hará que el viaje te cueste, digamos, 300€. Pero, al quitar estas restricciones, a lo mejor encuentras un viaje a Bruselas desde el 12 hasta el 16 de septiembre por 170€.
Ojo, ni siquiera es necesario tener flexibilidad total. Puedes probar relajando una sola de las variables (destino o fecha) y ver qué pasa. Tal vez encuentras que el mismo vuelo a Ámsterdam es 60€ más barato del 8 al 12 o que un vuelo a Berlín en tus fechas originales cuesta la mitad que a Ámsterdam.
Viajar barato: Por qué la rigidez te cuesta dinero
A grandes rasgos, los precios de los vuelos (y hasta cierto punto los de los alojamientos) dependen de la interacción de varios factores, que incluyen:
- La demanda: Cuánta gente quiere viajar a un destino en un momento dado. Por ejemplo: la demanda de turistas que quieren visitar Málaga es más alta durante julio y agosto que en marzo.
- La oferta: Cuántos visitantes “caben” en un destino o pueden usar un servicio en un momento dado. Aquí entran en juego los asientos de avión/tren, el número de hoteles, las habitaciones disponibles, etc.
- La competencia: Cuando hay varios proveedores de servicios, puede que compitan entre ellos bajando sus tarifas o añadiendo servicios gratuitos para ganar al cliente. Es el caso de las aerolíneas que vuelan en las mismas rutas y hoteles de categoría similar en la misma ciudad.
- El factor random: Cosas que se escapan de las leyes del mercado o de cualquier lógica comprensible para el cerebro humano. Por ejemplo, billetes de avión a Tokio por 200€ en Semana Santa o las promociones de billetes a 15€ que a veces saca Vueling.
Todos estos factores (además de muchos otros) juegan un papel en el precio que vas a acabar pagando por unas vacaciones. Cuando tienes rigidez en las fechas y el destino, te queda poco margen para abaratar el coste del viaje. Tus opciones quedan reducidas a escoger volar con Ryanair en vez de con Iberia o alojarte en un hostal en lugar de un hotel de tres estrellas.
La flexibilidad te permite evitar viajar en un camión de ganado con alas o alojarte en un zulo, ya que introduce una nueva variable a la ecuación: Las opciones. En el caso de que decidas flexibilizar las fechas, los beneficios son claros, el equilibrio entre la oferta y la demanda cambia radicalmente mes a mes e incluso de un día para otro (volar un martes te puede salir mucho más barato que un viernes y las tarifas de hotel se pueden incrementar los fines de semana.
Pero, si flexibilizas el destino, las posibilidades de ahorrar se multiplican exponencialmente. ¿Por qué? Me alegra que preguntes.
El motivo más obvio es que cada destino tiene particularidades que lo hacen único. Por ejemplo, las ciudades del este de Europa suelen ser, de por sí, bastante más económicas que París. Si flexibilizas el destino de tu viaje y, además de a París, buscas viajes a Budapest o Praga, no hace falta que te diga que el coste se va a reducir considerablemente.
Además, cada destino puede tener sus propias compañías aéreas que aplican tarifas radicalmente diferentes en función de su oferta/demanda/competencia. Si querías ir a Cartagena de Indias y amplías tu búsqueda a otros destinos en el Caribe, puede que encuentres mejores ofertas con aerolíneas de otros países. También, muchas compañías ofrecen distintas tarifas a destinos similares. Por ejemplo, Iberia casi siempre tiene tarifas más económicas para viajar a Boston que a Nueva York.
Y no son solo las compañías aéreas. Los costes de alojamiento también cambian mucho entre destinos y cadenas de hotel. Un hotel Barceló de 4* en Tenerife puede costar la mitad que un hotel de la misma cadena y categoría en Fuerteventura.
Viajar barato: Cómo planificar viajes con flexibilidad
Llegados a este punto, puede que estés pensando: “¿Cómo se supone que voy a comenzar a planificar un viaje si tengo que mantener todo en el aire?”
La respuesta es que no todo tiene que estar en el aire, siempre puedes establecer algunos límites en torno a tu búsqueda. Por ejemplo:
- Quiero viajar en otoño.
- Quiero ir a la playa.
- No quiero gastar más de X€.
A partir de aquí, puedes comenzar a sopesar diferentes destinos y fechas para ver cuál ofrece el mejor precio. Por ejemplo, puedes comenzar mirando vuelos a Madeira, pero si las tarifas aéreas están por las nubes, entonces, puedes mirar vuelos a las Canarias, escoger algunos destinos canarios que tengan vuelos baratos e investigar los costes de los hoteles en esos destinos.
Por último, decide entre la mejor combinación de fechas y destino y reserva tu viaje.
Este proceso puede parecer tedioso, pero imagínate cuántas veces lo has hecho al revés: comenzando con unas fechas y un destino concreto, y luego pagando el primer precio que has visto.
Viajar barato: Herramientas para encontrar vuelos económicos
A medida que este enfoque de viajes flexibles gana popularidad, varios sitios y aplicaciones de reservas de viajes han comenzado a ofrecer herramientas útiles diseñadas específicamente para facilitar encontrar vacaciones baratas y hacer menos tediosa la tarea de planificación.
Viajes económicos usando newsletters
Las newsletters de ofertas de billetes aéreos, como Travelzoo, son muestra de cómo muchos viajeros comienzan a pensar en términos de flexibilidad. Estos boletines y servicios de alertas envían un email a sus suscriptores cada vez que descubren una oferta de vuelos económicos.
Si vives en una ciudad hub de alguna aerolínea importante, como Madrid o Barcelona, también te puedes apuntar a los boletines de ofertas de las aerolíneas que más vuelos operen desde esos aeropuertos, como Iberia, Vueling o Air Europa.
Si estás suscrito a algunos de estos boletines, sabrás que los billetes en oferta suelen estar disponibles solo en determinadas fechas o para destinos seleccionados. Si estás buscando específicamente un vuelo Madrid – Guatemala, puede que tengas que esperar mucho tiempo para ver esa oferta exacta en tu buzón.
Pero si flexibilizas tus opciones, seguramente tarde o temprano te llegue una tarifa emocionante desde Madrid a cualquier otro sitio y podrás aprovecharla cuando esté disponible.
Para hoteles, siempre puedes usar la página de Ofertas Flash de Booking.com.
Viajar barato usando Skyscanner
Skyscanner es probablemente el mejor buscador de viajes en el mercado. Una de las funcionalidades por las que esta página destaca por encima de sus competidores es la posibilidad de encontrar vuelos baratos sin tener que introducir origen, destino ni fechas en concreto.
Para buscar los vuelos más baratos puedes iniciar tu búsqueda introduciendo tu aeropuerto más cercano, si te da igual, puedes ingresar un país entero. Por ejemplo, escribe “España” para encontrar el vuelo más barato desde todos los aeropuertos del país.
De igual forma puedes escoger un país entero para el destino. Si escoges “Italia”, Skyscanner te mostrará resultados de vuelos a Roma, Milán, Venecia, Bolonia, etc. Pero quizá la parte más interesante es que puedes escoger “Cualquier lugar” como destino. En este caso, la búsqueda mostrará resultados a los destinos a los que se puede llegar desde tu punto de partida ordenados por precio.
Si tienes las fechas en mente, ingrésalas en los cuadros “salida” y “regreso”. Pero si aún estás investigando las mejores épocas para viajar o no te importa la fecha, puedes buscar vuelos que vayan a todos los destinos posibles durante todo un mes. Por ejemplo, puedes ver instantáneamente cuáles son los destinos más baratos para volar desde España en marzo. Haz clic en el cuadro “Salida”, selecciona “Mes completo” y luego elige un mes, o simplemente selecciona la opción “Mes más económico”. Luego ingresa la clase de cabina y el número de pasajeros en el siguiente cuadro y presiona “Buscar”.
Skyscanner buscará en la web y enumerará todos los destinos a los que puedes viajar, comenzando por el más barato. Haz clic en el nombre del país y verás una lista de destinos, comenzando con la tarifa aérea más baja hasta la más alta.
Con solo un par de clics, puedes encontrar los vuelos más baratos a cualquier lugar y en la fecha más barata.
Google Flights – Vuelos
Muchos otros motores de búsqueda de viajes, como Kayak o Momondo, tienen también herramientas de búsqueda muy flexibles.
Pero Google Flights va un paso más allá y ofrece una función dirigida específicamente a viajes aún más flexibles. Se llama “Explorar” y te permite buscar de una manera totalmente abierta.
Para usar la herramienta, debes ingresar tu ciudad de salida, la duración del viaje que estás buscando y tu rango de precios, y Google arrojará un puñado de excelentes ofertas a varios destinos en distintos momentos dentro de tu rango de fechas.
En comparación con un servicio de alerta de ofertas, el inconveniente es que las ofertas disponibles que se muestran dependen de cuándo realices la búsqueda, pero es una excelente manera de considerar muchas opciones interesantes a la vez.
Conclusión: El secreto para viajar barato es la flexibilidad
Si siempre te has preguntado por qué otras personas pueden encontrar súper chollos de viajes mientras tu siempre pagas más, ya sabes por qué. Ser flexible con tus planes de viaje es la mejor manera de reducir el coste de unas vacaciones. Palabra de gurú.
Lo que es más, flexibilizar la forma en la que organizas tus viajes puede ser muy divertido. En lugar de planificar exactamente a dónde quieres ir y cuándo, puedes dejar que las ofertas que van surgiendo definan tus próximas vacaciones. Esta apertura puede ayudarte a viajar a lugares a los que nunca habías pensado ir y tener experiencias que nunca habrías tenido de otra manera.
Flexibilizar no significa que tengas que reservar un viaje en el último minuto o dejar de planificar por completo, simplemente significa dejar de lado dos variables, el cuándo y el dónde, y ver qué surge.
Si no funciona, siempre puedes reservar un viaje a la antigua. Pero, ¿recuerdas dónde guardaste la guía telefónica?
Qué interesante cambio de paradigma nos presentas para viajar más barato.
Es genial poder abrir nuestras opciones y explorar destinos y fechas de una manera más flexible. Al final, no se trata solo de ahorrar dinero, sino también de abrirnos a nuevas experiencias y sorpresas que podrían estar esperándonos en lugares que ni siquiera habíamos considerado.
Es cierto que para algunos puede resultar un poco desafiante dejar de lado la rigidez en la planificación, pero los beneficios que se pueden obtener son enormes. Imagina encontrar un vuelo a un destino increíble por mucho menos de lo que esperabas! Es como dar con un tesoro escondido.
Está excelente el tip viajero, claramente viajar con flexibilidad es lo que te permitirá conseguir descuentos para viajar cuando nadie lo hace.
Gracias por compartir.
Es sencillo pero muy cierto creo que lo principal es eso flexibilidad para encontrar los vuelos económicos si uno va a viajar a otro pais y encontrar este tipó de blogs para tips como estos gracias por la info
Gracias por este artículo, me hacía falta!