En la provincia de Cuenca se encuentra un destino fascinante llamado Ciudad Encantada. Este paisaje místico es un testimonio de las maravillas de la naturaleza y ofrece a los visitantes una experiencia realmente extraordinaria. Con sus formaciones geológicas únicas y sus impresionantes paisajes, no es de extrañar que Ciudad Encantada haya cautivado la imaginación de lugareños y visitantes durante siglos.
La Ciudad Encantada es un paraje natural situado en Castilla-La Mancha. Situada a unos 25 kilómetros al este de la ciudad de Cuenca, esta zona geológicamente única se encuentra dentro del Parque Natural de la Serranía de Cuenca.
El paisaje de Ciudad Encantada se compone de notables formaciones rocosas de piedra caliza que han sido erosionadas durante millones de años por las condiciones atmosféricas y el agua, dando lugar a una serie de formas y estructuras distintas. Algunas de estas formaciones se asemejan a rostros humanos, animales y diversas figuras mitológicas, de ahí el imaginativo nombre de la zona.
Los geólogos creen que el origen de estas inusuales formaciones rocosas se remonta a hace más de 90 millones de años, durante el Cretácico Superior. En aquella época, la región estaba sumergida bajo el agua y se componía principalmente de depósitos sedimentarios calcáreos. A lo largo de millones de años, las fuerzas tectónicas levantaron el terreno y lo expusieron a diversos procesos erosivos.
La Ciudad Encantada de Cuenca: Historia y localización
La Ciudad Encantada es un paraje natural de Cuenca, Castilla-La Mancha, España. Se encuentra a unos 25 kilómetros al sureste de la ciudad de Cuenca y a unos 15 kilómetros al este de la localidad de Villalba de la Sierra. El paraje comprende formaciones rocosas únicas formadas a lo largo de millones de años por diversos procesos geológicos, principalmente la erosión.
La geología de la Ciudad Encantada se remonta al Cretácico, hace unos 90 millones de años. La zona estuvo cubierta por el mar, que depositó capas de piedra caliza. Con el tiempo, estas capas fueron sometidas a levantamientos y plegamientos graduales como resultado de los movimientos de las placas tectónicas. A medida que el mar retrocedía y el clima cambiaba, la meteorización y la erosión esculpieron la cal iza en distintas formaciones que se asemejan a arcos, puentes, animales y otras formas.
La Ciudad Encantada fue documentada oficialmente por primera vez por Baltasar Ester y Mendoza en su obra “Historia de Cuenca”, publicada en 1770. A lo largo de la historia, la visitaron el botánico Casimiro Gómez Ortega en 1784 durante sus estudios sobre el roble portugués, el escritor español Gustavo Adolfo Bécquer, que la mencionó en una de sus leyendas titulada “La Rosa del Adio”, y el Infante Luis de Borbón y Farnesio durante sus viajes de exploración por los territorios españoles.
La zona está declarada Sitio Natural de Interés Nacional desde el 11 de junio de 1929, cuando una ley promulgada por la Segunda República Española protegió este insólito paisaje para las generaciones futuras. Además, las evidencias arqueológicas sugieren que los humanos han habitado esta región desde tiempos prehistóricos. Se trata de un lugar perfecto para hacer ecoturismo en Castilla-La Mancha.
Formaciones geológicas y maravillas naturales de Ciudad Encantada
La Ciudad Encantada presenta varias formaciones rocosas naturales modeladas a lo largo de millones de años por diversos procesos erosivos. Estas formaciones únicas tienen diferentes formas, que se asemejan a libros abiertos, esculturas abstractas, e incluso animales como osos y camellos. Algunas de las formaciones geológicas más características de Ciudad Encantada son:
- Los Barcos: Estas formaciones se asemejan a varios barcos de gran tamaño hechos de piedra caliza, mostrando los efectos de la erosión física y química.
- La Cara: Esta formación imita fielmente un rostro humano, casi como esculpido en piedra, pero se forma de forma natural por la erosión de las rocas a lo largo del tiempo.
- El Puente Romano: Un puente natural formado debido a la erosión diferencial, esta formación rocosa proporciona un intrigante ejemplo del trabajo de la naturaleza imitando la arquitectura humana.
- El Tobogán: Plano inclinado de rocas calizas que se asemeja a un tobogán y que evidencia los distintos grados de fuerzas erosivas que han actuado sobre él.
- El Perro: Otra estructura antropomorfa, esta formación rocosa encarna la forma de un perro sentado pacientemente.
- Las Setas: Estas peculiares formaciones con tallos finos y cimas anchas se asemejan a las setas y se forman debido a la diferencia en las tasas de erosión entre las capas más blandas y más duras de la piedra caliza.
- El Mar de Piedra: Una extensa zona cubierta de rocas calizas de formas irregulares muestra la enorme escala a la que la erosión ha esculpido el paisaje.
La visita a la Ciudad Encantada y su naturaleza también me sirvió para practicar con el modo macro de mi móvil, con el que pude captar imágenes de la pequeña flora (y fauna) del lugar.
Consejos prácticos para visitar Ciudad Encantada
Cuando visites Ciudad Encantada, sigue estos consejos prácticos:
- Planifica tu visita: Antes de ir a la Ciudad Encantada, infórmate de los horarios de apertura y las tarifas de entrada en el sitio web oficial. Así estarás preparado para la aventura.
- Lleva calzado cómodo: El sitio natural cuenta con caminos y senderos para explorar las formaciones rocosas. Llevar calzado adecuado hará que tu visita sea más agradable.
- Lleva lo imprescindible para una excursión: Equípate con crema solar, gafas de sol, sombrero y agua para protegerte de los rayos del sol y mantenerte hidratado.
- Infórmate sobre el tiempo: Echa un vistazo a la previsión meteorológica antes de visitar la Ciudad Encantada para evitar sorpresas o interrupciones.
- Dedícale tiempo: Al menos tres horas son necesarias para disfrutar de la belleza de la Ciudad Encantada sin prisas.
- Visitas guiadas: Si prefieres una experiencia informativa, considera unirte a una visita guiada para aprender más sobre la historia y la geología de este lugar único.
- Respeta la naturaleza: Durante tu estancia en Ciudad Encantada, no olvides respetar el medio ambiente, no tirando basura ni dañando las formaciones rocosas.
- Organización del viaje: Organiza el transporte con antelación, ya que el transporte público es limitado en esta zona. Alquilar un coche o reservar una excursión que incluya transporte pueden ser opciones convenientes.
La Ciudad Encantada de Cuenca: Cómo llegar
Hay varias formas de llegar a Ciudad Encantada: en coche, transporte público, taxi y tour privado.
En coche: Podrás llegar a Ciudad Encantada por la autovía A-40 desde Madrid en dirección a Teruel y después por la carretera provincial CM-2105. El trayecto dura aproximadamente 2 horas desde Madrid y 30 minutos desde Cuenca. Se puede aparcar a la entrada del yacimiento.
En transporte público: Hay un autobús turístico desde la estación central de autobuses de Cuenca hasta Ciudad Encantada. El trayecto dura unos 45 minutos, pero hay que consultar la disponibilidad en la oficina de turismo de la ciudad (Ayuntamiento de Cuenca, Plaza Mayor, 1) el día de la salida. Otra opción desde el centro de Cuenca es la línea 12 de autobús hasta Valdecabras. Después, deberás caminar unos 5 kilómetros por un sendero señalizado hasta Ciudad Encantada.
En taxi: Hay taxis disponibles tanto en la estación central de tren de Cuenca como en la terminal de autobuses. Pueden negociar con el conductor una tarifa de ida y vuelta para visitar Ciudad Encantada, incluyendo el tiempo de espera mientras exploras el lugar.
En tour privado: Varias empresas turísticas locales ofrecen visitas guiadas a la Ciudad Encantada. Estas visitas suelen incluir transporte desde Madrid o Cuenca, entradas al parque y comentarios de expertos sobre la geología y la historia únicas de Ciudad Encantada. Los precios y horarios varían en función de las empresas y los itinerarios.
