Para los madrileños, visitar Salamanca es muy fácil. Sin embargo, los que vivimos en Barcelona lo tenemos algo más complicado. Los precios prohibitivos de los vuelos de Air Nostrum me obligaron a viajar desde Barcelona a Salamanca en autobús. Este es un resumen de mi paso por la Ciudad Dorada.
Salamanca, Patrimonio de la Humanidad
Salamanca fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1988 y, no sin razón, fue la Capital Europea de la Cultura 2002.
La Universidad de Salamanca se fundó en 1218, siendo la universidad más antigua de España y la tercera de Europa. Cristóbal Colón dio una conferencia allí y entre sus alumnos más famosos destacan Hernán Cortés y Miguel de Cervantes. La ciudad se convirtió en un importante centro de enseñanza superior, hecho que aún se mantiene hasta nuestros días. Los estudiantes universitarios que llegan de toda España junto con los estudiantes internacionales que van a la ciudad para aprender español representan aproximadamente el 20% de la población de la ciudad. Esto se traduce en un mosaico de culturas y en ser una de las ciudades con el ratio de bares por persona más alto de Europa.
Salamanca se envuelve de una atmósfera especial al anochecer, cuando los edificios de arenisca se vuelven dorados al ser tocados por el sol del atardecer, y comienzan a encenderse las luces de la ciudad. Los elaborados detalles de las antiguas fachadas de los edificios se vuelven aún más visibles con el resplandor de la luz. Esto ha hecho que se conozca la ciudad como Salamanca La Dorada o La Ciudad Dorada.
Para ser una ciudad tan pequeña, Salamanca tiene una oferta de actividades culturales muy variada.
Explorando Salamanca
La mejor forma de conocer la ciudad es caminando. En mi recorrido, salí de la Plaza Mayor y caminé hacia el sur siguiendo el río Tormes, pasando por los puntos clave de Salamanca, muchos de los cuales se conservan como si los siglos no hbieran pasado por ellos.
La Plaza Mayor
Salamanca es una ciudad pequeña. La mayor actividad comercial y peatonal se centra cerca de la Plaza Mayor, la plaza principal de la ciudad. Finalizada en 1755, la Plaza Mayor de Salamanca jugó un papel muy importante en el renacer de la ciudad, después del ocaso general que aconteció tras el Renacimiento. La Plaza Mayor es el punto perfecto para empezar a explorar la ciudad.
Los medallones ubicados en las enjutas de los ochenta y ocho arcos de la plaza tienen esculpidos bustos de personajes importantes e ilustres de la historia de la ciudad y el reino. En su mayoría se trata de monarcas y otras personalidades como escritores, pintores, y conquistadores. Entre los bustos de Felipe II, Hernán Cortés o Miguel de Unamuno, me llamaron especial atención dos medallones.
El primer medallón que me sorprendió encontrar fue el de Juan de Maldonado de Ordoñez y Villaquirán, conquistador español y fundador de San Cristóbal, la ciudad donde nací.
El otro busto que me llamó la atención, esta vez negativamente, fue el de Francisco Franco, que aún se exhibe en la esquina del Pabellón Real de la plaza.
La plaza es una de las mejores que hay en España y en ella hay numerosos restaurantes, heladerías y otras tiendas. Aquí se encuentra también la oficina de turismo, al lado del Ayuntamiento, en la fachada principal de las que componen la plaza.
Si quieres comer sin pagar “precios turísticos”, evita la plaza y sus alrededores y busca restaurantes que sirvan menú del día.
La Clerecía y la Casa de las Conchas
La fachada principal de la Clerecía, construida en estilo barroco entre los siglos XVII y XIX, alberga la Universidad Pontificia de Salamanca, creada en la década de 1940 a partir de las facultades de derecho canónico y teología de la Universidad de Salamanca, que fueron disueltas en los 1800. Está enfrente de la Casa de las Conchas, construida en el siglo XV. Su nombre lo recibe por las 350 conchas que adornan su fachada. Ahora alberga una biblioteca pública.
Las dos Catedrales de Salamanca
Las dos catedrales están una junto a la otra. La Catedral Nueva se puede ver desde los alrededores de la Plaza Mayor. Fue construida entre los siglos XVI y XVIII y su arquitectura combina los estilos Gótico y Barroco. Uno de los muros de la Catedral Nueva se apoya en la pared norte de la catedral vieja, que tuvo que ser reforzada. También fue entonces cuando se añadió la torre del campanario a la Catedral Vieja. El lugar donde se unen las dos catedrales se llama Patio Chico. La Catedral Vieja fue completada en el siglo XIV en estilo románico.
Entre los relieves que adornan una de las fachadas de la Catedral Nueva encontramos una enigmática figura que poco tiene que ver con el siglo XVI. La estatua de un astronauta se cuela entre los motivos florales y animales característicos de la decoración de la iglesia. Esta peculiar talla es una adición moderna que formó parte de la restauración llevada a cabo en la catedral en 1992 y en la que se quiso dar a la iglesia un toque de modernidad.
El Puente Romano
Cerca de la zona de las dos catedrales camino del río Tormes, se llega al Puente Romano, que data del año 89 d.C., si bien fue parcialmente reconstruido en el siglo XVII, después de que las inundaciones dañaran 11 de sus 26 arcos. Hoy en día, 15 de los arcos romanos originales todavían sustentan el puente, que fue la puerta de entrada a la ciudad antigua y formó parte de la Via de la Plata, la calzada romana que iba de Mérida a Astorga.
El Convento de San Esteban
Después de caminar hacia el noreste por los límites de la ciudad vieja, llegué al Convento de San Esteban. Este complejo religioso del 1618 alberga un monasterio y es conocido por su claustro, su retablo barrcoco y el arco de triunfo de su fachada. Muchos edificios históricos de Salamanca, incluido el convento, se proyectaron siguiendo el mismo estilo: el plateresco, que estaba de moda durante el Renacimiento español.
Archivo de la Guerra Civil Española
El Archivo General de la Guerra Civil Española es un archivo estatal fundado en 1999 y que está integrado dentro del Centro Documental de la Memoria Histórica.
Está ubicado en el antiguo Colegio de San Ambrosio, un antiguo hospicio.
Fue creado a partir de la Sección de la Guerra Civil del Archivo Histórico Nacional, almacenado tras la guerra por el regimen franquista para recopilar toda la documentación incautada durante la guerra.
La documentación contenida en el Archivo fue utilizada con fines represivos para juzgar a los enemigos republicanos.
En la actualidad es una fuente documental de gran valor para historiadores.
Fotos de Salamanca
