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Qué ver en Estambul en dos días

Crucero por el Cuerno de Oro
Crucero por el Cuerno de Oro
Atardecer en Estambul con la silueta de una mezquita
Atardecer en con la silueta de una mezquita

Atardece en el Bósforo. El cielo prende en llamas y una manta de oro parece flotar tras las nubes. A medida que la noche cae sobre la metrópolis, parece arrastrar consigo los ruidos típicos de la ciudad. De repente, siento como si el jaleo de los ires y venires, de los vendedores de los bazares, de los niños que juegan en las calles fuese sustituído por un silencio casi absoluto.

Las gaviotas revolotean encima del puente Gálata mientras que intento absorber la ciudad con los ojos, regodearme en el momento, parar el tiempo.

Y es que esta urbe turca es una ciudad sin igual. Durante su dilatada historia, ha sido capital de poderosos imperios, punto de encuentro de diversas culturas, centro religioso e importante puerto. Todos estos factores han marcado profundamente la ciudad y han dejado una indeleble huella en su identidad.

Estambul ha sido Bizancio, Constantinopla y Stamboul.

Estambul ha sido muchas cosas, pero por encima de todo, Estambul ha sido un sueño, una fantasía, el pináculo de la entelequia casi irreal de generaciones enteras de románticos occidentales. Para los europeos, esta metrópolis turca es una ciudad que está muy cerca y muy lejos a la vez. Estambul es la idealización romántica del exotismo oriental.

Estambul en un fin de semana

La magia de Estambul tiene esa extraña mezcla entre Oriente y Occidente. Con el olor de las especias el bullicio de su Zoco que contrasta con la elegancia decadente de su barrio Europeo, en la otra orilla del Cuerno de Oro, es una ciudad que produce en el que la visita la extraña sensación de viajar en tan solo unos minutos del Barrio Alto lisboeta a la medina de Marrakech.

Desde el punto de vista práctico, Estambul es un destino perfecto para una escapada urbana debido a su diversidad cultural, cercanía geográfica y precios accesibles. Además, es el mejor puerto de entrada para explorar Asia Menor.

La mejor época para visitar suele ser en el otoño, cuando las masas de turistas veraniegos se han replegado y las temperaturas siguen siendo agradable. El otoño es también la época en la que se pueden encontrar las ofertas más apetitosas en empresas turísticas como www.circuitosturquia.com.

Santa Sofía (Hagia Sophia)

Santa Sofía, Estambul
Santa Sofía, Estambul

La antigua basílica patriarcal ortodoxa, posteriormente utilizada como mezquita es hoy el museo de la ciudad y es el tercer templo que ocupa el solar. El primero fue edificado en el año 360 y el segundo en el año 415 de las cuales no queda más que algún bloque de mármol con con los relieves de unos corderos representando a los Apóstoles y que podemos ver a la entrada del museo.

El templo definitivo se construyó cerca del Gran Palacio en el año 560 durante el imperio de Justiniano I para servir de iglesia grande. Es un conglomerado de tradiciones arquitectónicas orientales y elementos mesopotámicos, persas y sirios que incluye también formas griegas, romanas y paleocristianas. Todo ello, junto con su gran bóveda de 32 metros de diámetro construida sobre cuatro pechinas en lugar de tambor, constituyen todo un hito de la arquitectura mundial.

Con la toma de Constantinopla por parte de los turcos en 1453 y tras su conversión a mezquita, le fueron añadidos sus cuatro minaretes característicos, además de otros elementos islámicos, eliminando a su vez mosaicos cristianos primitivos. En el año 1935, tras una profunda restauración, abrió sus puertas como museo.

Además, los alrededores de Santa Sofía están entre las mejores zonas donde dormir en Estambul, pues alojarse en esta zona permite conocer la mayoría de los atractivos de la ciudad.

La Mezquita Azul

Mezquita Azul
Mezquita Azul

Ocupa el lugar de lo que fue el Gran Palacio de Constantinopla, justo frente a Santa Sofía. Comenzó a construirse en 1609 con la intención de competir con la que hasta entonces era la más venerada mezquita de la ciudad. Su construcción tardó 8 años en finalizarse.

La estructura de la Mezquita Azul es una extraña mezcla de iglesia bizantina y mezquita otomana, inspirándose probablemente en su vecina Santa Sofía, y cuenta con la peculiaridad de poseer seis minaretes (lo habitual son cuatro), un capricho del sultán, que quería emular a la mezquita de La Meca, que por aquel entonces contaba también con seis minaretes.

En su interior, más de 20.000 azulejos de cerámica hechos a mano representan frutas y árboles de la región, completando el conjunto con decoraciones azules de motivos geométricos y caligráficos.

La Cisterna Basílica

Cisterna Basílica de Estambul
Cisterna Basílica de Estambul

La Cisterna Basílica es también llamada “la catedral de agua”, es un depósito de agua subterráneo. Fue construido en el año 532, también durante el reinado de Justiniano I, para asegurar el suministro de agua a la antigua ciudad de Bizancio (posteriormente Constantinopla) en tiempos de crisis y ante la fragilidad que suponía un ataque a su acueducto. Se encuentra situada a escasos metros de Santa Sofía.

El apodo de “basílica” proviene posiblemente de una antigua edificación existente sobre ella.

Abastecía de agua a los edificios más importantes de la ciudad como el Palacio de Topkapi, pero con los años cayó en desuso y quedó abandonada.

Fue redescubierta en el siglo XVI, siendo utilizada como almacén. A mediados del siglo XIX fue restaurada, pero no sería hasta la década de los 80 del siglo XX que fue abierta al público tras sacar las varias toneladas de lodo que la llenaban.

Tiene una superficie total de 9.800 m2 y una capacidad de 80.000 m3. Un nivel de agua mínimo como el de la actualidad permite apreciar las 336 columnas de mármol de aproximadamente 9 metros de altura y coronadas con capiteles de estilos jónico y corintio, en su interior también pueden verse dos curiosas bases con cabezas de medusas esculpidas, posiblemente tomadas de algún viejo templo romano.

El Gran Bazar

Gran Bazar de Estambul
Gran Bazar de Estambul

El Gran Bazar de Estambul es una de las primeras instituciones que se establecieron en la ciudad tras la conquista musulmana de 1453. Consiste en un recinto cerrado de 45.000 m2, con 22 puertas y 4.000 tiendas distribuidas en calles cubiertas a modo de gran galería. Entre sus locales destacan talleres de orfebrería, alfombras y especias. Es el mayor bazar de la ciudad.

Su parte más antigua es el denominado Bedestán interior, lo que en su día fue un antiguo almacén y hoy son librerías, joyerías y tiendas de sombreros y disfraces.

Bazar de las Especias

Bazar de las especias
Bazar de las especias

Los aromas y colores invaden lo que es el segundo bazar más grande de Estambul, construido entre 1663 y 1664. Recibió el curioso nombre de Bazar Egipcio o de los cereales por la gran cantidad de negocios dedicados a productos venidos de Oriente y el Norte de África, entre ellos destacaban las especias.

Cuenta con 88 tiendas. Originalmente el mercado era parte de un complejo más grande que incluía la mezquita nueva de Yeni Camii, un cementerio y una escuela, y por ello tiene una curiosa forma de L que rodea el templo.

El Puente Gálata

Pescadores en el puente Gálata
Pescadores en el puente Gálata

Este bullicioso puente de 490 metros sobre el denominado Cuerno de Oro, el estuario de la ciudad, es el punto de conexión entre el barrio occidental y la parte oriental de Estambul y hoy es un lugar de reunión para los aficionados y profesionales de la pesca donde es curioso observar al atardecer toda una maraña de cañas disputándose las mejores piezas. En su parte baja se concentran restaurantes de comida típica que ofrecen algunos de los más deliciosos platos de pescado.

Beyoglu, la ciudad nueva

Pera
Pera

A este distrito de la parte europea también se le conoce por el nombre de Pera, que significa “el otro lado” y que se comunica con el casco antiguo mediante los puentes de Gálata y Unkanapi. Presidido por uno de los monumentos más característicos de Estambul, la torre Gálata, las calles de este zona, especialmente la calle Istiklal, siguen manteniendo el aspecto de algunas decadentes ciudades europeas. Beyoglu es el corazón artístico y de ocio de la ciudad.

Crucero por el Cuerno de Oro

Crucero por el Cuerno de Oro
Crucero por el Cuerno de Oro

Estambul está estratégicamente situada en estuario a las entrada del Bósforo, y tomar uno de los numerosos barcos para recorrer la costa del denominado Cuerno de Oro es toda una experiencia para los sentidos, que se incrementa si lo hacemos al atardecer, cuando el sol dorado lo baña todo y recorta en el horizonte las siluetas de las mezquitas. En este recorrido por el que es uno de los mejores puertos naturales podremos contemplar ambas orillas de lo que es el viejo y el nuevo Estambul, como la torre y el puente Gálata, los barrios de Fener y Balat, o el palacio de Dolmabaçe construido a finales del siglo XIX en un curioso estilo renacentista otomano a semejanza de los europeos Buckingham Palace o el Louvre, una forma que el sultán tenía de acercar la cultura occidental a embajadores y visitantes.

Palacio de Topkapi

Desde la invasión turca y hasta el año 1853 fue el centro administrativo del Imperio Otomano. Está situado entre el cuerno de Oro y el Mar de Mármara y se compone de un complejo de edificios de típica arquitectura turca separados por cuatro patios y jardines rodeados por una muralla bizantina.

Baños turcos

Son una de las tradiciones más importantes de Estambul. El más famoso de los baños turcos de Estambul, Cemberlitas, fue establecido por la sultana Nurbanu en el año 1584, próximo al Gran Bazar. Tiene dos instalaciones separadas para hombres y mujeres, y ofrece el típico baño de vapor, masaje y la posibilidad de relajarse en unas instalaciones centenarias.

Soy Luis Cicerone, creador de xixerone.com y viajero incansable. Mis pasiones, además de recorrer el mundo, incluyen los gatos, la comida, las series y la arquitectura.