¿Qué se te ha perdido en Bucarest?
Eso es lo que me preguntaban familiares y conocidos cuando les decía que quería visitar la capital de Rumanía.
– Si ahí no hay nada, sólo edificios comunistas y gitanas. – No dudaban en decirme mis amigos, muchos de los cuales entienden de viajes.
Y yo, siendo tan terco como soy, cogí mi tarjeta de crédito un buen día y busqué un vuelo barato a Bucarest.
A lo mejor era por llevar la contraria, a lo mejor porque soy un optimista sin remedio que esperaba encontrar en Bucarest algo más de lo que su reputación como ciudad fea del Este de Europa dejaba entrever. Al final nada, tenían razón todos. Bucarest es fea.
Se ve que hace años, esta ciudad era conocida como la París del Este. La verdad es que no entiendo por qué.
Al final va a ser verdad que Bucarest no puede competir con Budapest o Praga, bien es sabido que en estas dos últimas ciudades los edificios se encuentran en perfectas condiciones y no existe un legado comunista, dónde va a parar.
Y por mucho que la busques, en Bucarest no hay cultura, los museos y la vida alternativa brillan por su ausencia.
Se trata de una jungla de asfalto y hormigón, en la que cada rincón ha sido urbanizado salvajemente hasta no dejar ni un árbol.
Ah, además es extremadamente pobre, llena de chabolas.
En fin, cuando mezclas todos estos factores con comida poco apetitosa, te das cuenta de que probablemente te encuentras ante la peor ciudad de Europa. No, del mundo.
Por estos motivos creo que no vale la pena visitar Bucarest. De hecho, no vayáis.
“Es cierto que cuantos menos sepan de esta joya, menos turistas la van a arruinar”
Eso es muy intenso, muy interesante, tal vez por que me da por ser analista filosófico o soy paranoico nada más. Eso mismo he pensado de algunos lugares que me han encantado (sabéis que MEX es muy amplio con muchas cosas). Me recuerda también a Dicaprio en La Playa, donde a los “spring breakers” se les llama parásitos destructores.
Tu ironía me ha resultado magnífica,casi me mosqueo al comienzo de tu exposición.Rumanía es genial y Bucarest también,viajo a menudo y cada vez me gusta más.
Gracias por el comentario y por entender mi sarcasmo :)
jajaja, yo también casi me lo creo ;)
YO he estado en Bucarest y vale, quizás no es una ciudad preciosa pero tampoco es tan y tan fea y además sí tiene cosas que merecen la pena.
La imagen que me viene de Bucuresti es el de una ciudad de grandes avenidas donde, si te apartabas, ni que fuera un momento, de las calles más anchas, veías pobreza, gitanos, suciedad y todo lo demás, pero en las grandes avenidas el lavado de cara de la ciudad es bastante bueno.
Aparte de eso, hay algunos museos interesantes y sitios con clase a los que ir a comer, no lo veo tan mal. También hay palacios y basílicas muy bonitas, pero claro, no puede competir con Budapest y menos con Praha, que son mucho más bellas… pero tampoco es oro todo lo que reluce, la gente de Praga me parecieron unos bordes pero los rumanos, la mayoría de ellos, eran buena gente.
Hola! Tengo preparado un viaje para verano a Bucarest. Me encantaria hablar contigo por privado, claramente sabes mucho de la ciudad hahaha. Si te interesa hablame a mi correo
Muchas gracias!! :)
Muy bueno, directamente he ido a mirar vuelos.
Pues disfruta de esa ciudad tan fea! :)
Jejeje me ha echo gracia y más aún cuando algunos no han captado la ironía de tus palabras. Chico eres un genio, la forma en que describes y muestras esta ciudad tan “fea”. Me alegro de que hay personas que disfrutan de cosas que otros pasan por lo alto.
Muy buenas fotos y fantástica ironía. Ahora bien, una precisión: “el París del Este” se le llamaba a Budapest, no a Bucarest ;-)
Hola Rafa, se ve que es un apelativo bastante común: http://en.wikipedia.org/wiki/Paris_of_the_East
Buenísimo, casi me lo creo!
:)
Hombre, al principio te decepciona… al día siguiente ya la ves más atractiva y, para terminar, si te ocurre como a nosotros, incluso descubres alguna plaza grandiosa que no habías visto todavía y que te encanta (allí se encuentra el edificio del Ateneo, que merece la pena visitar por dentro y por fuera… el museo de pintura y otras maravillas. Los edificios, en general, en muy mal estado, pero en nuestro caso, el hotel fabuloso y hemos comido estupendamente y a un precio asequible. Las terrazas muy agradables.
Muy bueno el post! Al principio me lo creí y todo pero con esas fotazas te das cuenta de la ironía. Nunca he estado pero parece un bonito lugar al que habrá que visitar. ¡Saludos!
Gracias por el comentario Álvaro!
A medida que leía tus comentarios se me ponían los ojos como platos.No podía entender que alguien hable así de una ciudad de la que yo me he enamorado,como de pocas.De todas formas,entiendo tu “engaño”.No dejemos que Bucarest pierda su esencia por culpa del turismo de masas.Así,las disfrutaremos unos cuantos,unos años más sin agobios.
Jajaja, logré el efecto deseado!
Es cierto que cuantos menos sepan de esta joya, menos turistas la van a arruinar.
Muy grande el artículo! Mi curiosidad ya la has picado :)
Halaaaaa! A nosotros no nos pareció tan fea! XDXD Vale que no puede competir con Praga o con Viena, pero tiene algunos edificios chulos (como la basílica ortodoxa o el palacio del pueblo). Quizá fuera porque para nosotros fue el primer viaje que se salía de lo típico, pero Bucarest tampoco nos pareció mal del todo :P
Jajajaja, no habéis pillado la ironía!
ufff jajajaja vale, el otro día andábamos un poco espesos. Es que conocemos a varias personas que han vuelto echando pestes de allí, así que siempre defendemos la ciudad a capa y espada :P