El hotel Ciutat de Tarragona es un hotel de cuatro estrellas ubicado en al lado de la estación de autobuses y muy cerca del centro histórico de Tarragona.
Se trata de un hotel de estilo moderno y que cuenta con piscina y un pequeño spa en la terraza.
Las habitaciones del hotel son espaciosas y decoradas con colores tostados y neutros, de estilo contemporáneo, si bien un poco aséptico. Da la impresión de que se trata más de un hotel de business que de uno vacacional. Las camas son amplísimas y muy cómodas.
Están bastante bien equipadas e incluyen internet por cable y wifi (lo cual se agradece), también disponen de insonorización de primer orden, por la noche no se oye absolutamente nada de lo que pasa fuera.
Los lavabos están inmaculados y son bastante amplios, el mío disponía de bañera y constaba de dos partes, la de baño y retrete por un lado, y la zona del lavamanos por otro. El hotel dispone de todos los artículos de higiene necesarios.
El desayuno estaba bastante en línea con lo que se puede esperar de un hotel de la categoría del Ciutat de Tarragona. Constaba de una selección de platos fríos y algunos calientes. Parece que el hotel ha hecho un esfuerzo por adaptar su desayuno a una clientela internacional, pero yo eché de menos más variedad en los platos calientes y en los zumos (de los que sólo había dos tipos).
En la terraza del hotel encontramos una zona dedicada al relax, con una pequeña piscina, un jacuzzi y una zona de spa-gimnasio provista con tres máquinas y una sauna, todo muy mini.
Durante mi finde en la ciudad el tiempo no acompañaba lo suficiente para meterme en la piscina, sin embargo durante el verano seguro que se agradece.
Instalaciones
Bar, Adaptado personas de movilidad reducida, Habitaciones familiares, Ascensor, Caja fuerte, Habitaciones insonorizadas, Calefacción, Guardaequipaje, Aire acondicionado, Restaurante (a la carta), Terraza / solárium, Gimnasio, Sauna, Piscina, Jacuzzi.
Hay Wi-Fi gratis en todo el hotel.
En resumen: El Hotel Ciutat de Tarragona es un muy buen hotel de categoría superior en Tarragona y es un lugar que tendré en cuenta en futuras visitas a la ciudad.
Lo mejor: Su ubicación, la comodidad de la cama y la insonorización de las habitaciones.
Lo peor: La poca variedad en el desayuno.
