¿Alguna vez te has alojado en un lugar en el que te sientes tan cómodo que no te apetece salir de allí? A mí me ocurrió en Berlín.
En mi última estancia en la capital alemana me alojé en los apartamentos turísticos Miniloft y me sentía tan a gusto que a veces dudaba entre salir a explorar la ciudad o quedarme en el apartamento haciendo vida local. Después recordaba que parte de la vida local en Berlín consiste en aprovechar los días de sol a toda costa y me animaba, pero quería ilustrar lo mucho que me gustaron estos apartamentos.
Se trata de una especie de apartotel de un estilo arquitectónico vanguardista, ubicado en el corazón del centro (o uno de los centros) de Berlín, en Mitte, muy cerca del Museum für Naturkunde (Museo de Ciencias Naturales) y a diez minutos de Friedrichstrasse.
La zona en la que se emplazan los Miniloft es, por tanto, muy céntrica, pero de corte residencial y de oficinas, sin los típicos ires y venires que se esperan de una capital como Berlín.
En las ventajas que tiene alojarse en un apartamento en lugar de en un hotel no voy a ahondar mucho. Independencia, privacidad y la existencia de un espacio para preparar comidas son los principales puntos a favor de este tipo de alojamiento y con Miniloft no fue de otra manera. Mi apartamento estába equipado con cocina, comedor y un área social con TV de plasma y dos sofás.
La distribución era estilo loft (lo cual no es una sorpresa dado su nombre), por lo que el único tabique divisorio entre los espacios era el que separaba el baño del resto del piso. La cama estaba en medio de la estancia sin ninguna pared a su lado, lo cual en un primer momento me pareció algo extraño, pero me acabé acostumbrando.
El baño era amplio, disponía de bañera e incluía productos de higiene personal que destacaban en su etiquetaje su neutralidad medioambiental. De hecho, el concepto entero de Miniloft es el de ser un alojamiento completamente respetuoso con el medio ambiente. Desde su arquitectura, que emplea materiales duraderos y de bajo impacto, hasta los detergentes y productos biodegradables que se emplean para su limpieza, Miniloft mantiene un compromiso de calidad “verde” que no había experimentado en ningún otro establecimiento.
La decoración del apartamento era muy Berlín-chic. Con un estilo rabiosamente contemporáneo que combinaba madera, metal y hormigón para conjugar un estilo propio, entre el rústico y el industrial, sin dejar de lado la comodidad.
Pero lo que realmente me enamoró de los Miniloft fue su luz. No sé si tiene que ver con los materiales empleados, con el hecho de que la pared exterior de mi apartamento era básicamente una ventana gigante o con la orientación del edificio, pero la luz que incidía sobre el apartamento era absolutamente perfecta.
Cuando marché del Miniloft de Berlín, lo hice con la certeza de que podría vivir allí para siempre.
Detalles
Precio: Desde 80€/n
Dirección: Hessische Str. 5, 10115 Berlín.
Teléfono: +49 30 847 109 0
Web: www.miniloft.com
