Una compilación de cinco destinos que me gustaría visitar antes de que se pierdan literal o figurativamente.
Azerbaiján
La otrora República Soviética está ubicada en el Cáucaso, a caballo entre Europa y Asia.
Desde tiempos inmemoriales, Azerbaijan ha sido un punto de intercambio y encuentro de razas y religiones.
Geográficamente Azerbaiján está dominada por tres zonas, las montañas del Cáucaso al norte, las costas del mar Caspio al este y las planicies en el oeste y centro del país.
Musulmán, conservador y productor de petróleo, el país tiene reminiscencias al medio oriente con una importante influencia soviética y un toque de Europa Occidental.
La minúscula nación es famosa, además de por haber ganado la última edición del festival de Eurovisión, por haber ganado la última edición del festival de Eurovisión.
Hasta mayo de este año, Azerbaijan era una gran desconocida para muchos. Sería muy ambicioso creer que la celebración del próximo festival de Eurovisión en su capital, Bakú vaya a corromper el relativo secreto en el que se mantiene Azerbaijan para la inmensa mayoría de europeos occidentales, pero también es cierto que un evento de tal envergadura cambie la percepción que se tiene del país en nuestras mentes y que probablemente la industria turística viva un salto importante.
Me gustaría ver Azerbaiján antes de que se llene de turistas ingleses.
Cuba
Muy pocas cosas se pueden decir de Cuba que no se sepan ya. La isla caribeña está asociada a infinidad de símbolos populares. Desde el Ché Guevara hasta la música tropical, pasando por la represión, las playas, los coches de los años cincuenta y la fiesta.
En los últimos años el mundo ha sido testigo de la apertura, a cuentagotas, eso sí, de uno de los regímenes más herméticos del mundo, de la occidentalización de una de las últimas repúblicas socialistas y de la lenta capitalización del país.
Me gustaría ver Cuba antes de que se convierta en el estado 52.
Islas Maldivas
Este pequeño y paradisíaco archipiélago ubicado en el Océano Índico parece sacado de una postal, sin embargo, desde hace años, los científicos anuncian que el cámbio climático y el subsecuente aumento del nivel de mar hará que las islas desaparezcan bajo las aguas.
La velocidad en la subida del nivel del mar se mide en torno a un centímetro por año, debido a que la mayoría de las islas se elevan tan sólo un metro sobre el nivel del mar, se estima que en menos de un siglo el archipiélago se haga inhabitable.
Me gustaría visitar las Maldivas antes de que desaparezcan bajo el mar, afortunadamente aún tengo tiempo.
Serbia
La más grande de las naciones que conformaban la antigua Yugoslavia, Serbia es quizá el país que mejor engloba el pasado comunista de estas tierras. Belgrado, su capital, se encuentra ubicada en las confluencias de los ríos Sava y Danubio y es un polo cultural de gran importancia en la península de los Balcanes.
En el 2009, Serbia inició oficialmente su proceso de adhesión a la Unión Europea, que se estima habrá acabado satisfactoriamente en el año 2014.
Me gustaría ver Serbia antes de que se convierta en “una más”.
Filipinas
Filipinas es, teóricamente, lo que Tailandia era hace 40 años, un paraíso por explorar a los que las hordas de turistas aún no llegan. Si bien el turismo es un ingrediente primordial en la economía del país, a diferencia de Tailandia, aún pueden encontrarse en muchas de las islas del archipiélago, rincones de paz sin aviones jumbo charters procedentes de Europa y América.
Me gustaría ver Filipinas antes de que se prostituya.
