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La contaminación del Taj Mahal

El Taj Mahal es uno de esos monumentos que siempre se recomienda visitar, aunque lo cierto es que mucha gente no sabe que a día de hoy, la contaminación excesiva de Agra está poniendo en serio compromiso a la belleza del lugar.

Esta contaminación hace que todas las piezas del palacio se estén deteriorando demasiado rápido. El mármol se está coloreando de amarillo, y la contaminación del río Yamuna, los gases tóxicos de los vehículos y generadores eléctricos, tan abundantes en la ciudad, así como los trabajos de construcción ilegales, no están haciendo nada precisamente positivo para el lugar.

Es por ello que desde 1997, la Corte Suprema de la India ha estado cerrando fábricas de la zona. Otro medio adoptado es la prohibición de circular en el interior del recinto, salvo si se hace con vehículos eléctricos.

El problema es que esto no es suficiente. En primer lugar porque ya no se puede arreglar algunos de los desperfectos ya causados, y en segundo lugar porque no se está procediendo como se debería. Agra es una ciudad con más de un millón de habitantes, y la contaminación no es precisamente la primera preocupación de los mismos. Por ello, aunque se solucionen algunos de los problemas en el propio recinto, lo cierto es que si el resto de la ciudad mantiene sus costumbres, poco se va a poder solucionar.

Y a estos problemas le sumamos los inconvenientes en la estabilidad estructural que se llevan viendo desde el año 1985 debido a la sequía que se traduce en la disminución de caudal del río, cambiando la humedad del suelo y, por tanto, su capacidad portante.

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Estudié Arquitectura Técnica en la UCAM e Ingeniería Industrial en la UNED. Me gusta viajar y he vivido en distintos países. En la actualidad combino mis negocios con mi pasión por la música y la escritura para conseguir vivir plenamente.