Clicky

Curiosidades de Londres: El tren de los muertos

Fachada de la estación de la Necrópolis en Waterloo

Desde 1854 hasta 1941, existió una línea de trenes operada por la London Necropolis Railway que servía la ruta entre la estación Londinense de Waterloo y el cementerio de Brookwood en Surrey (a unos 40 kilómetros). Esta curiosa línea de cercanías era empleada exclusivamente para el transporte de difuntos y sus dolientes desde el centro de la ciudad hasta su lugar final de descanso.

Durante los años en los que prestó servicio, este curioso tren era conocido por los londinenses como el “Fiambre Express” o el “Tren de los Tiesos”.

Esta es su historia.

La Necrópolis de

A mediados del siglo xix. La ciudad de Londres empezaba a carecer de espacios para enterrar a sus muertos. La población urbana se había duplicado en cincuenta años, y la epidemia de cólera de 1848 acabó con la vida de 15.000 personas en la capital.

Los problemas de salud derivados de apretar tal cantidad de cadáveres en un espacio reducido empezaban a notarse y era necesaria una solución antes de que la situación se escapase de las manos. Es así como en 1849, Sir Richard Broun propuso la creación de un cementerio en las afueras de la ciudad como una opción eficiente y económica de enterrar a los muertos de Londres.

En 1855 la London Necropolis and National Mausoleum abrió sus puertas en Brookwood, a 40 kilómetros al sudoeste de Londres.

En el momento de su inauguración, el cementerio de dos mil hectáreas era el camposanto más extenso del mundo y se creía suficiente para dar sepultura a todos los londinenses que falleciesen mientras la ciudad existiera.

Las parcelas estaban disponibles en varias parroquias y sociedades, pero cualquiera podía ser enterrado en la parcela que deseara siempre y cuando pudiese costeárselo.

Desde 1854, Brookwood ha visto más de doscientos cuarenta mil entierros y actualmente está dividido en secciones dedicadas a distintos credos así como cementerios militares y memoriales.

En la actualidad el cementerio está catalogado como un bien de interés social y cultural.

La línea

La ubicación del cementerio fue escogida especificamente por su proximidad a la London and South Western Railway que discurría entre London-Waterloo y Southampton. Broun tenía intención de proveer un servicio que transportase a los difuntos desde Londres a Brookwood, idea que había sido rechazada en un primer momento al considerarse que un ruidoso y sucio tren no era un medio respetable de transporte para procesiones fúnebres.

Los trenes tendrían dos secciones; una para anglicanos y otra para protestantes. Esto evitaría el que los pasajeros se sintieran “incómodos” de compartir vagón con personas de distinto credo.

Estructura

La línea se contruyó de forma rápida durante el otoño de 1854 y estaba lista llegado noviembre. Aunque se utilizaría la línea ya construida entre Waterloo y Woking, se anexaron secciones con estaciones separadas al principio y al final del recorrido.

Con dos estaciones construidas en el mismo cementerio; los trenes hacían parada primero en la estación Norte del cementerio, utilizada por los protestantes y posteriormente en la estación del lado sur, que servía a las comunidades Anglicanas.

Mientras tanto, se construyó una estación terminal especial junto a Waterloo que duraría hasta 1902, cuando se amplió la estación y se ubicó su entrada en el 121 de Westminster Bridge Road. El nuevo edificio era mucho más amplio que el original, e incluía entre otras cosas, una sala de espera de primera clase y una capilla mortuoria.

Operación

El primer tren partió el 13 de noviembre de 1854, la mayoría de los convoyes partían una vez al día los días en que había funerales. Si embargo, a principios del siglo xx los servicios diarios fueron remplazados por servicios on-demand y ya en 1930 la operación se vio reducida a un par de partidas semanales debido al incremento en el uso de automóviles.

Los servicios utilizaban trenes especiales consistentes en vagones de pasajeros, para los vivos, y coches mortuorios para los decesos. Además de la división entre religiones, los trenes contaban con vagones de primera, segunda y tercera clase con distintos niveles de confort dependiendo de lo que los dolientes estuviesen dispuestos a pagar. La distinción de clases se aplicaba también a los coches fúnebres que se enganchaban detrás de los vagones de pasajeros.

Final de línea

El servicio continuó intermitentemente hasta 1941, cuando una bomba alemana arrasó el edificio y destruyó el tren. La compañía decidió esperar al final de la guerra para reconstruir la estación y reinaugurar el servicio, pero a esas alturas ya no era rentable la reconstrucción por lo que se decidió abandonar el negocio.

En 1948 se habían retirado las vías privadas. Las dos estaciones de los cementerios fueron convertidas en bares para uso de los asistentes a funerales y posteriormente destruidas.

Aún sobreviven los andenes y las capillas de ambas estaciones así como la fachada del edificio en el 121 de Westminster Bridge Road.

http://maps.google.es/maps/ms?ie=UTF8&hl=es&t=h&msa=0&msid=102560155014792510699.00048ea20d12b1c383d0d&ll=51.414625,-0.302124&spn=0.599548,1.170044&z=9&output=embed
Ver Necropolis Railway London en un mapa más grande

Apúntate a nuestro boletín

Únete a nuestra comunidad de adictos a los viajes y recibe nuestro mejor contenido por correo electrónico.

Nunca te enviaremos spam ni compartiremos tus datos con terceros.

Soy Luis Cicerone, creador de xixerone.com y viajero incansable. Mis pasiones, además de recorrer el mundo, incluyen los gatos, la comida, las series y la arquitectura.